Sobremesa

Ernestina no debe ir al Senado, sino a la cárcel

La justicia finalmente ha comenzado a desenmascarar las mentiras y manipulaciones de Ernestina Godoy y Santiago Nieto Castillo.

Un fuerte a pico de botella

Les cuento que el caso del supuesto espionaje en el edificio Márquez Sterling, que había sido planeado -leyeron bien, planeado- para ser el más mediático del gobierno de Claudia Sheinbaum, quesque en su batalla contra la corrupción y la impunidad, terminó convertido en uno más de tantos casos fabricados, y pronto, en la pesadilla de Ernestina Godoy.

Baste decirles que todos los exfuncionarios que fueron injustamente encarcelados y presumidos como el mayor logro contra el gobierno de Miguel Ángel Mancera, hoy están libres. A través de sus relatos desgarradores he revelado, en este mismo espacio, la corrupción y el abuso de poder al que están dispuestos a llegar Ernestina Godoy y Santiago Nieto con tal de satisfacer las venganzas de la 4T. Hoy, Ernestina y Santiago buscan desesperadamente el fuero como senadores de la República.

Desde diciembre de 2018, la fiscalía de la CDMX, de Ernestina Godoy, maquinó un plan siniestro basado en la venganza y la persecución política. Les pido imaginar el escenario:

Eres trabajador de gobierno y de pronto llega a tu oficina, que es del Gobierno del CDMX, un operativo de cateo ilegal, con la presencia intimidante de la mismísima fiscal Ernestina Godoy y una veintena de policías irrumpiendo en tu edificio derivado de una denuncia anónima, sin respeto por los protocolos legales ni por la dignidad de las personas que allí trabajaban, y te someten a interrogatorios, rompen puertas, abren computadoras, siembran evidencias y la propia fiscal dice “ahí hay cables, ahí hay computadoras, esto es un centro de espionaje”.

Sigan imaginando

Luego, lanzan órdenes de aprehensión a ti y a tus compañeros de oficina, sin pruebas, sin pies ni cabeza, sólo alimentadas por las ganas de tener un circo mediático contra la corrupción y la impunidad en la CDMX, tipo el circo al que se prestó el criminal confeso Emilio Lozoya a nivel federal. ¡Qué terror! Así es. Se sabían impunes por el poder que ostentaban.

Lo que imaginaron fue lo que pasó

Sí, personas inocentes, funcionarios que simplemente cumplían con su labor, fueron señalados y arrastrados a un remolino de angustia y desesperación. Los días se convirtieron en años tras las rejas, víctimas de un sistema que los abandonó a su suerte y los mantuvo presos “en lo que se investigaba”.

Los carniceros de hoy serán las reses del mañana

Pero la justicia finalmente ha comenzado a desenmascarar las mentiras y manipulaciones de Godoy y Nieto. Un juez federal determinó que no hubo elementos para vincular a proceso a ninguno de los acusados, y que la actuación de los jueces de la CDMX fue ilegal desde el principio. Así, todos aquellos que fueron injustamente encarcelados ahora están libres, menos uno -inhale y exhale-, Arturo Zavala, una de las víctimas de este caso, quien es un recordatorio demoledor de las consecuencias de la negligencia y el abuso de poder de Ernestina Godoy. Arturo suplicó por atención médica, mientras su salud se deterioraba en prisión. Sus súplicas fueron ignoradas y su vida fue tratada con desdén. Falleció a causa de la tortura psicológica que sufrió por parte de Godoy y como resultado directo de la negligencia del director del Reclusorio Norte, que le negó la atención médica, y del juez que le negó el cambio de medida cautelar. Es una mancha indeleble que pesará en la conciencia de quienes permitieron que ocurriera.

Perdone usted, es inocente

A casi seis años de ese cateo ilegal, se desmoronó el montaje de mentiras y manipulaciones de Godoy, a costa de seis vidas perdidas en el laberinto de la injusticia, una familia destrozada, un niño huérfano cuyo futuro quedó truncado por la ambición desmedida de usar el aparato de justicia para venganzas personales y políticas.

FGR, Gertz Manero, ¿por qué no has judicializado las carpetas que estos chavos presentaron en su contra?

Mientras tanto, los responsables continúan en libertad y cínicamente pidiendo el voto y rogando por fuero.

Pero eso no es lo peor de su falta de ética y moral. Resulta que Omar García Harfuch y Ernestina se colgaron de que sus comparsas Sandra Cuevas y Alejandra Barrales, fórmula de MC para ser senadoras por la CDMX, no quisieron debatir el 5 de mayo, e hicieron lo mismo. Tuvieron miedo, le tuvieron miedo a debatir con Verónica Juárez y Cynthia López Castro, candidatas del PAN, PRI y PRD, y no sólo fue porque no tienen agenda legislativa, sino porque no tienen argumentos para defender la gestión de la Sheinbaum y la propia en la Fiscalía y la Policía. Ojo, los votos de Omar son también para Ernestina.

¿Usted le cree a la Fiscalía de la CDMX? Yo tampoco.

Yo le creo a Ceci Flores.

Y ya que hablo de impresentables…

En Querétaro, parece que Morena mandó a sus peores cuadros. Por un lado, al cuentacuentos de Santiago Nieto para el Senado y para la capital a José María Tapia. Ambos con señalamientos por propiedades que no corresponden a los ingresos por las funciones que han desempeñado. Les gusta a los arribistas de Morena hablar de ‘cárteles’, menos de los que deberían combatir, y en Querétaro, Chema Tapia acaba de ser exhibido por tener propiedades por más de 100 mdp y pagando, al menos por dos de ellas, en efectivo 40 mdp. Por el expriista encargado del Fonden debería empezar Santiago Nieto a cuestionar, pero en una de esas permutan propiedades. En Querétaro, el chiste de Morena se cuenta solo, y retrata de cuerpo entero a estos dos promotores del ‘cártel’ de la impunidad y la extorsión que representa la 4T.

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